LA REALIDAD DE LAS PROFESIONES. YEIZA SARMIENTO. UNA CAMARERA DE CARRERA.

En estas fechas en que la subida de precios de las cafeterías universitarias han dado tanto de qué hablar, y que ha finalizado con la bajada y mejora de la oferta, carné de estudiante en mano. Pero ciñéndonos a la temática de nuestra sección es Carmen la protagonista esta semana, esa cara amable que nos atiende cada día en la cafetería de la Facultad de Ciencias de la Comunicación.

Nombre: Carmen Garrido Sánchez

Edad: 32 años y malagueña.

Y. ¿Cuántos años llevas trabajando en Hostelería?

Carmen: Llevo trabajando seis años, de lunes a viernes aquí en la Facultad y los fines de semana en restaurantes.

Y. ¿Dónde te encuentras más cómoda?

Carmen: Aquí me siento más cómoda, la relación con los estudiantes es bastante buena, pues, en los restaurantes se trabaja de otra manera, el trato es más distante.

Y. ¿Qué turnos prefieres?

Carmen: Me da igual mañana que tarde, pero prefiero el horario de tarde para poder descansar, me encanta dormir.

Y. En la cafetería está colgada una caricatura tuya, ¿por qué está ahí?

Carmen: estuve trabajando en la cafetería de Informática, y los chicos se enteraron de mi cumpleaños y me hicieron una tarjeta con esa imagen.

Y. Respecto a tus compañeros, ¿qué consejo les darías?

Carmen: “Paciencia con la gente”, muchos compañeros cuando van de clientes son más difíciles de tratar, se olvidan de que ellos también son camareros y lo mal que lo pasan cuando están trabajando.

Y. Sobre la subida de precios y la nueva medida de enseñar el carné de estudiante, ¿que nos dices?

Carmen: los precios se suben por convenio, y lo de pedir el carné se sobrelleva, por ahora ninguno nos pone impedimento. Pero al tener que firmar se demoran las colas mucho más. Yo si no trabajara lo ponía más barato, pero no todo, hay cosas que no se les puede bajar más el precio.

Y. Cuéntanos alguna anécdota.

Carmen: A un compañero que no dominaba el español, le pidieron un Cola-Cao en vaso de caña, y él preparó una copa con cerveza y le añadió el cacao, y se lo dio al cliente. Cuando nos dimos cuenta nos reímos muchísimo.

Y. ¿Cuáles son tus planes de futuro?

Carmen: Mi sueño es ser profesora de Autoescuela. En mayo me saqué el título, y si me surgiera la oportunidad de ejercer lo haría inmediatamente, mientras aquí estoy bien.