ES LA PERSONA, NO EL SEXO. LUIS ALGORÓ.

Pidiendo disculpas por el retraso, tienen aquí la primera de las entrevistas que 'Es la persona, no el sexo' les quiere ofrecer. Hoy es el turno de Miguel y María dos hermanos y fruteros malagueños (Frutería Trilo, Camino del Pato) que con su amabilidad se ganan al público día tras día. Un hombre y una mujer ante la misma profesión con dos vidas diferentes y a la vez muy familiares. Gracias a ambos por la entrevista concedida.

Luis Algoró: ¿El trabajo lo veis como una profesión o una forma de vida?

María: Una profesión. Me ayuda mucho el trabajar para vivir ya que en casa me aburro demasiado.

Miguel: Una forma de vida. Siempre me he movido en este terreno aunque nunca se sabe si al cambiar de profesión es posible que te sorprenda. Pero 30 años en este ámbito son muchos.

L.A:¿Igualdad en el trabajo de la frutería?

MA: Lo mismo, cada uno hace lo que sea necesario, independientemente de la fuerza que haya que invertir. Eso sí no puedo coger dos cajas de la vez (risas).

MI: ‘Por coger dos cajas a la vez tengo el hombro torcido’-bromea. Lo mismo hace uno que otro, tanto fregar, limpiar o recoger es cosa de los dos.

L.A: ¿Los clientes se declinan por uno u otro por cuestión del sexo?

MA: A la mayoría le da igual. Alguno no elige entre el hombre o la mujer sino en la persona que le atienda. Siempre hay favoritismo porque conozcan más a uno que al otro, los años, el conocer sus gustos…

MI: Hay excepciones pero como dice mi hermana no por ser mujer u hombre sino porque la conocen de más tiempo.

L.A: Otras profesiones realizadas…

MA: Siempre he sido frutera. No la cambiaría por otra ya que me gusta este trabajo.

MI: He estado de repartidor de frutas o recogiendo en el campo con 16 años. Es diferente ya que no es lo mismo llegar y soltar la mercancía que estar con el público directamente día tras día. Hay que saber llegar a ellos. Repartiendo en la calle también debes saber como tratar a cada uno.

L.A: ¿En vuestras casas hay igualdad?

MA: En mi casa no. Las cosas del hogar son siempre para mí. Yo he sido la culpable porque nunca me he puesto en mi lugar. Sin embargo si que ayudo a mi marido en el campo cuando es necesario.

MI: Cada uno se dedica a una cosa. Mi mujer a la casa y yo al campo pero si me pide ayuda o es necesario no soy nada perezoso ni machista y le ayudo en casa.

L.A: ¿Los niños siguen el ejemplo?

MA: Cada vez peor, no sirve de nada estar chillándoles porque no hacen caso. El niño trabaja fuera de casa pero dentro no se hace ni la cama.

MI: En alguna cosa que otra si que colaboran. Cuando se acuestan llegan reventados y es normal que no tengan ganas de colaborar en casa. Son tres hermanos y una hermana, es la niña la que más colabora.

L.A: MENSAJE POR LA IGUALDAD DE GÉNERO.

María: DEBERÍA CAMBIAR EL SISTEMA QUE DEFIENDE A LAS MUJERES MALTRATADAS YA QUE NO SE CUMPLEN LAS ÓRDENES DE ALEJAMIENTO. NO SE LLEGA A TIEMPO COMO HA OCURRIDO EN LOS ÚLTIMOS CASOS. EN LA SOCIEDAD DEBE PRODUCIRSE UN CAMBIO GENERAL, SOBRE TODO EN VALORES.

Miguel: UNA PARTE DE LO QUE PASA ES CULPA DE LA JUSTICIA Y LA TELEVISIÓN. ESTA ÚLTIMA INCITA A MATAR A MUCHOS HOMBRES. ESO SÍ, TAMPOCO HAY IGUALDAD EN LAS SEPARACIONES DONDE NO SE VALORA LA SITUACIÓN SINO DIRECTAMENTE SE BENEFICIA A LA MUJER. CADA CIRCUNSTANCIA ES DISTINTA Y SE HAN DADO CASOS DE QUE EL HOMBRE MAL VIVE Y LA MUJER VIVE ESTUPENDAMENTE.