Después de un lunes bastante movido y tras pasar la media noche, no puedo dejar pasar la oportunidad de cada semana para expresar de ese cúmulo de experiencias y sentimientos que se me viene a la cabeza, dando un respiro a la rutina y al ritmo sin freno de la vida que vivimos.
Esta semana ha supuesto el inicio tras la mágica noche de Reyes, a las clases, a la Facultad. De nuevo encontrarme con caras que se extrañan cuando están lejos, con caras que miran sin fuerza y con otras que te lo dan todo con la mirada. Miles de miradas deseando un feliz año, año de bienes e ilusiones. Una vuelta que será corta ya que esta semana volveremos a cortar las clases para vernos el próximo martes en el primer examen de este segundo curso, donde los nervios estarán a flor de piel aunque ya empiezan a hacerse notar en el estudio constante.
Llegan momentos duros y pesados paran cualquier estudiante pero pasarán y todo volverá a la normalidad. La semana me ha dejado miles de momentos y entre ellos el retorno a una amistad, que poco a poco se reafirma, vuelve a empezar, vuelve a sonar a vida, vuelve a llenar el corazón.
Tampoco puedo olvidar las conversaciones contigo mi vida, los momentos más altos y bajos pero las mas sinceras reconciliaciones que son las mejores tras algunos enfadillos, que solo quedan en eso. Me encantó pasar contigo muchos de los momentos de esta semana entre ellos el día de Reyes, gracias por tus regalos pero sobre todo por tu amor desinteresado.
Esta es mi última sección con diecinueve años para el domingo dar paso a los 20, ojalá lo que venga sea siempre mejor. Gracias a todos los que seguís guiándome por el camino de esta vida que paseo con intriga por el futuro que a veces se hace tan presente.
Marina espero que todo vaya bien con tus prácticas y os deseo a todos unas horas de estudio que no se hagan muy pesadas y sobre todo una semana donde al menos una estrella se encienda para vosotros.
OS QUIERE, COMO SIEMPRE, EL DE SIEMPRE...
LUIS ALGORÓ.
Esta semana ha supuesto el inicio tras la mágica noche de Reyes, a las clases, a la Facultad. De nuevo encontrarme con caras que se extrañan cuando están lejos, con caras que miran sin fuerza y con otras que te lo dan todo con la mirada. Miles de miradas deseando un feliz año, año de bienes e ilusiones. Una vuelta que será corta ya que esta semana volveremos a cortar las clases para vernos el próximo martes en el primer examen de este segundo curso, donde los nervios estarán a flor de piel aunque ya empiezan a hacerse notar en el estudio constante.
Llegan momentos duros y pesados paran cualquier estudiante pero pasarán y todo volverá a la normalidad. La semana me ha dejado miles de momentos y entre ellos el retorno a una amistad, que poco a poco se reafirma, vuelve a empezar, vuelve a sonar a vida, vuelve a llenar el corazón.
Tampoco puedo olvidar las conversaciones contigo mi vida, los momentos más altos y bajos pero las mas sinceras reconciliaciones que son las mejores tras algunos enfadillos, que solo quedan en eso. Me encantó pasar contigo muchos de los momentos de esta semana entre ellos el día de Reyes, gracias por tus regalos pero sobre todo por tu amor desinteresado.
Esta es mi última sección con diecinueve años para el domingo dar paso a los 20, ojalá lo que venga sea siempre mejor. Gracias a todos los que seguís guiándome por el camino de esta vida que paseo con intriga por el futuro que a veces se hace tan presente.
Marina espero que todo vaya bien con tus prácticas y os deseo a todos unas horas de estudio que no se hagan muy pesadas y sobre todo una semana donde al menos una estrella se encienda para vosotros.
OS QUIERE, COMO SIEMPRE, EL DE SIEMPRE...
LUIS ALGORÓ.
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