Hoy me comentaba una compañera y amiga de clase, asidua al blog, que le encantaba ver cómo cada semana en esta sección enseñaba algo nuevo de mi vida, y demostraba que el corazón puede dar y vivir mucho.
La verdad es que cada semana es una aventura nueva que vivir, cada semana es un sin fin de momentos mejores o peores pero llenos de intensidad que se desbordan en este rincón de algorocontigo.
Esta semana he seguido con la sonrisa en mi cara porque alguien no ha dejado de ilusionarme, es como si el mundo fuese un jardín de rosas, como si la vida fuese diferente.
Y estos días me traerán a la mente muchos momentos que viví, porque como cada año volveré a pisar la arena rociera para llegar a los pies de la Blanca Paloma y pedirle miles de cosillas y agradecerle tantas cosas. Porque qué ganas de estar contigo SEÑORA DEL ROCIO, SEÑORA DEL CAMINO, para contarte tantas cosas que sabes bien que ocupan mi mente y mi alma.
Puedo decir que ha sido una semana muy feliz, aunque no puedo olvidar a alguien que sé que lo está pasando mal, a una familia que vive intrigado por el que será, por el qué pasará, ojalá la brisa rociera traiga SALUD y cure todas las enfermedades y todas las heridas.
Además no puedo olvidarme de esos niños a los que tanto quiero que hicieron su Primera Comunión el pasado sábado, un día muy especial en el que las lágrimas no pudieron evitar salir, pero que fueron muestra de agradecimiento a esos diez corazones que me han dado unos años maravillosos. Siempre os llevaré en el corazón.
Hoy nos llevamos un pequeño susto pero al final no fue nada gracias a Dios, todo va estupendo y todo sigue como tiene que ir, porque la rociera que vendrá tiene muchas ganas de volar y de vivir.
Sin más, despedirme una semana más, desearos unos días estupendos y que la FELICIDAD os llene para siempre.
Saludos.
Luis Algoró.
La verdad es que cada semana es una aventura nueva que vivir, cada semana es un sin fin de momentos mejores o peores pero llenos de intensidad que se desbordan en este rincón de algorocontigo.
Esta semana he seguido con la sonrisa en mi cara porque alguien no ha dejado de ilusionarme, es como si el mundo fuese un jardín de rosas, como si la vida fuese diferente.
Y estos días me traerán a la mente muchos momentos que viví, porque como cada año volveré a pisar la arena rociera para llegar a los pies de la Blanca Paloma y pedirle miles de cosillas y agradecerle tantas cosas. Porque qué ganas de estar contigo SEÑORA DEL ROCIO, SEÑORA DEL CAMINO, para contarte tantas cosas que sabes bien que ocupan mi mente y mi alma.
Puedo decir que ha sido una semana muy feliz, aunque no puedo olvidar a alguien que sé que lo está pasando mal, a una familia que vive intrigado por el que será, por el qué pasará, ojalá la brisa rociera traiga SALUD y cure todas las enfermedades y todas las heridas.
Además no puedo olvidarme de esos niños a los que tanto quiero que hicieron su Primera Comunión el pasado sábado, un día muy especial en el que las lágrimas no pudieron evitar salir, pero que fueron muestra de agradecimiento a esos diez corazones que me han dado unos años maravillosos. Siempre os llevaré en el corazón.
Hoy nos llevamos un pequeño susto pero al final no fue nada gracias a Dios, todo va estupendo y todo sigue como tiene que ir, porque la rociera que vendrá tiene muchas ganas de volar y de vivir.
Sin más, despedirme una semana más, desearos unos días estupendos y que la FELICIDAD os llene para siempre.
Saludos.
Luis Algoró.
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